EL VÍA CRUCIS Y LA SAETA DE LA VÍA SACRA EN CASTRO DEL RÍO
LA COFRADÍA DEL SANTO VIA CRUCIS
La saeta de la Vía Sacra está
relacionada con el ejercicio del Vía Crucis y con la desaparecida Cofradía del
Santo Vía Crucis existente en Castro del Río. Del libro “Jesús Nazareno y la Semana
Santa de Castro del Río, cinco siglos de historia” del cronista local Juan
Aranda Doncel, extraemos los orígenes de la Cofradía del Santo Vía Crucis:
“En las primeras décadas del siglo XX la
cuaresma adquiere una relevancia especial en la villa del Guadajoz con el
nacimiento de la cofradía del Vía Crucis que contribuye a potenciar esta
práctica religiosa. La fundación se pone en marcha por iniciativa de un
numeroso grupo formado por medio centenar de personas que se dirigen al prelado
de la diócesis el 2 de febrero de 1902 para solicitar la aprobación de la
hermandad.
En el escrito se hace referencia a la
necesidad de organizar y dinamizar la tradicional vía sacra que recorre desde
hace más de cuarenta años las estaciones marcadas en las calles de la población
en la madrugada del viernes con una gran afluencia de penitentes:
“Que hace más de cuarenta años vienen
practicando en todos los viernes de cuaresma y hora de su madrugada en las
mismas estaciones que nuestros padres y abuelos practicaron el Santo ejercicio
del Vía-Crucis, y aumentándose de día en día el número de personas que
concurren a este acto con carácter de penitencia, unos demostrada en las cruces
con gran peso y dimensiones que llevan en sus hombros a la vez que la desnudez
de los pies en otros y todos con gran recogimiento y devoción recitando el
Salmo Miserere y visitando las catorce estaciones marcadas en las distintas
calles de este pueblo, según el modelo de este Santo ejercicio aprobado por la
Iglesia, y habiendo resultado en el último año por la afluencia de gente la
necesidad de uno que con cierto carácter oficial ordene la procesión y reciba a
la vez las limosnas que espontáneamente ofrecen los fieles para el consumo de
las luces que preceden a la Santa Cruz y estipendio o gratificación al
sacerdote que preside este acto…”
El multitudinario acto penitencial de
los viernes de cuaresma justifica la fundación de la cofradía del Vía Crucis
que se establece en la iglesia de Jesús Nazareno. La petición de los fundadores
de la hermandad del Vía Crucis recibe el visto bueno del titular de la mitra
cordobesa que aprueba asimismo la elección de hermano mayor y secretario a
favor de Antonio Pulido Millán y Miguel J. Elías Centella respectivamente.
El 22 de junio de 1902 se elaboran las
constituciones que regulan la organización y funcionamiento de la recién
instaurada cofradía, cuya aprobación definitiva por la autoridad diocesana se
lleva a cabo el 9 de marzo de 1904.”
Los capítulos 6, 7 y 8 de sus reglas
describen el horario, recorrido, los elementos del cortejo procesional y la
misa al concluir el recorrido:
Capítulo 6º. La procesión del Vía-Crucis saldrá todos los
viernes de Cuaresma de la Iglesia de Nuestro Padre Jesús Nazareno, donde está
erigida, a las tres de la madrugada y recorrerá la carrera de la población,
parándose a leer la estación en los sitios de costumbre o sea donde está
señalado con una cruz que se haya fijada en las paredes.
Capítulo7º.La procesión se compondrá de
una cruz que saldrá delante con dos faroles uno a cada lado; los cofrades y
demás personas que acompañen formarán dos filas y cerrará la procesión un
sacerdote con paño de hombros con un Santo Cristo en las manos y dos faroles
uno a cada lado.
Capítulo8º.Concluida la procesión el
sacerdote dirá una Misa en la iglesia de Nuestro Padre Jesús Nazareno, la que
será pagada por la Hermandad y aplicada por el alma del Hermano que halla
fallecido durante el año y si hubiesen fallecido dos o más se les aplicarán las
demás Misas por el orden de su defunción.
RECUERDOS DE FRANCISCO JOSÉ SALIDO
MÁRMOL, ANTONIO SALIDO BRAVO Y JUAN BALTANÁS
Francisco J. Salido Mármol recordaba de
esta manera la saeta de la Vía Sacra durante el desfile de la Cofradía del Via
Crucis:
“Esta saeta del Vía Crucis, la Vía
Sacra, para mí tienen unas connotaciones de muchos años. A dormir fuera de mi
casa, pues lo hacía en casa de mis abuelos, al sonido del despertador que se
ponía a las cuatro de la mañana, en los viernes de cuaresma. En este Vía Crucis
por las calles de Castro, muchos hombres y mujeres llevaban al Cristo de la
Buena Muerte por la Vía Sacra. Yo me sentía elevado por los brazos de mi abuelo
y de mi tío Fausto para que me vieran cantar algunas de aquellas saetas de la
Vía Sacra.
Estas saetas son totalmente autóctonas,
hechas por hijos de Castro del Río y tienen una peculiar toná; y en su
composición evangélica son muy bellas.
Mi abuelo y Pedro el Serenito, salían en
esos viernes de cuaresma acompañados de muchos feligreses, castreños que por
cumplir una penitencia o por participar dentro de la liturgia cuaresmal, salían
a las cinco de la mañana.
Y en cada estación, colocadas en las
distintas casas de la carrera, había un hombre llamado Pedro “el Serenito”, que
en un viejo libro o libretilla, con unas gomas que llevaba él en su bolsillo,
realizaba con voz pausada y grave, con un sentimiento profundo la lectura y el
seguimiento del Vía Crucis.
Tras la interpretación de la
correspondiente saeta se rompía el silencio de la madrugada con el Miserere, y
cuando acababa, el roce de los pies en el suelo, el entrechocar de las cruces y
el murmullo del Santo Rosario.”
Antonio Salido Bravo comentaba en su
libro Semana Santa de Castro del Río de 1984:
“Voy a retroceder en mi relato ya que
quisiera decir algo del Vía crucis, o Vía-Sacra, como le llamamos los
castreños. Recuerdo que la noche del jueves nos acostábamos antes con el fin de
levantarnos a las cinco de la madrugada, que es cuando salía. El Vía crucis era
el pórtico de la Semana Santa. Los chiquillos, disfrutábamos mucho. Salían
muchísimos nazarenos haciendo penitencia. Tenía dos horas de recorrido, y
durante el mismo se hacía una parada en cada estación. Se leía muy bien por
cierto, la estación correspondiente por aquel hombre llamado Pedro, de apodo el
“Serenito” que tenía una técnica depurada en este menester. Era hombre
vinculado a la Semana Santa, con una fe y pasión difícil de igualar. Se cantaba
un verso de Miserere y una saeta. Esta es la saeta a que antes me refiero y de
un tono distinto. Entonces tenía yo once años. Parece que estoy viendo a mi tío
Rafaelico cuando entonaba la saeta que decía:
Crucificado alma mía
y de tu amor hecho alarde
estuvo nuestra alegría,
desde las doce del día
hasta las tres de la tarde.
Juan Baltanás, Maestro Nacional,
escribía en el librito de Semana Santa
de 1947, un artículo titulado “Semana Santa en Castro del Río”, donde describía
el Vía-Crucis:
“…he de decir que si alguna cosa tiene
Castro que le realce es su Vía-Crucis y su Semana Santa. El Vía-Crucis es
sencillamente impresionante. Los que no hemos visto esto, sino en el interior
de las Iglesias, al ver por las calles gran número de personas y penitentes
rezando sus preces en cada Vía-Crucis que hay en las fachadas, a esa hora de
las 6 de la mañana en que el silencio es sepulcral, nos impresiona de tal
manera, que dudamos muchas veces, cómo puede haber personas malas en un pueblo
que esto hace.”
LA DESAPARICIÓN DE LA COFRADÍA Y
DE LAS SAETAS DE LA VÍA SACRA Y SU RECUPERACIÓN TRAS PERMANECER TREINTA AÑOS
SIN INTERPRETARSE
A pesar del fuerte impulso que llevó a
la fundación de la Cofradía del Santo Vía Crucis, llega un momento en los
primeros años de la década de los cincuenta en que deja de realizarse el
ejercicio del vía crucis. Tomando como referencia el trabajo de Francisco
Morales “La saeta de la Vía sacra de Castro del Río”, que desarrolló el 11 de
marzo de 2004 con motivo de los actos de conmemoración del primer centenario de
la fundación de la Cofradía del Santo Vía Crucis, actos organizados por la
Cofradía del Cristo de la Salud y celebrados en la Iglesia de Madre de Dios,
decía al respecto:
“En los primeros años de la década de
los cincuenta-desconozco las razones-el ejercicio del Vía Crucis deja de
realizarse. Pero a pesar de no existir su motivación, la saeta de la Vía Sacra
permaneció latente en el corazón y la memoria de muchos castreños, que las
interpretaban en reducidos círculos familiares y de amistad.
Fue una suerte que el Sábado Santo de
1983, Paco Salido Mármol, que tanto sabe de estas cosas, como leal continuador
de la familia de los “Pistolas”, semanasantera y pregonera de raigambre,, y
cuya impostada y bien timbrada voz ejecuta con fidelidad todas las expresiones
vocales de nuestra Semana Santa, nos reuniera a un grupo de amigos en la Peña
Flamenca para recogerlas en una grabación. “
Además de las grabaciones de los estilos
de saeta castreña relató sus recuerdos vinculados al Vía Crucis y a la saeta de la Vía Sacra.
“A partir de ahí, aparece como un
resurgimiento de la idea del Vía Crucis y de su compañera inseparable de la
saeta de la Vía Sacra: conferencias, artículos y audiciones removieron el
sentir castreño sobre su motivación, creándose conciencia para su rescate, lo
que se hizo realidad a principios de la década de los noventa, merced a la
buena disposición del Párroco Don Andrés García Torralvo y de las Cofradías y
Hermandades de Semana Santa, organizándose el Vía Crucis el primer Viernes de
Cuaresma, lo que se ha mantenido hasta el momento por los Párrocos que le
siguieron.”
6.1.4-LA SAETA DE LA VÍA SACRA EN LA ACTUALIDAD
Actualmente podemos escuchar la Saeta de
la Vía Sacra en el Vía Crucis que organizan las Cofradías y Hermandades de
Semana Santa el primer viernes de cuaresma. El segundo viernes de cuaresma en
el Vía Crucis que organiza la Cofradía del Cristo de la Salud por las calles
del barrio de la Virgen de la Salud, dentro de los actos del Quinario que se
celebra en su honor, así como en su desfile procesional del Martes Santo. Y por
último también se puede escuchar en la procesión de Jesús Nazareno intercaladas
entre los pregones que se le cantan a Jesús al paso por las correspondientes
estaciones.
En cuanto a sus intérpretes antiguos
citamos: Rafael Salido Garrido y Pedro Moreno Gallardo, Cristóbal Rojano
Cívico, Juan Doncel Herencia y José Portillo Merino; y actuales a Francisco
Salido Mármol, José Villegas, Juan Luis Navajas, Francisco Prados y Juan
Porcel.
En cuanto a las catorce letras hemos hallado dos
libretas una de Paco Salido Mármol, anotada en 1950; y otra de “el Brochero”
seguramente de finales de la década de los treinta.
6.1.5-SAETAS DE LA VÍA SACRA
I
(Francisco J. Salido, Brochero)
A una columna enlazado
azotes muy desiguales
recibió y quedó llagado
el Pontífice Sagrado
con cinco mil cardenales.
II
(Francisco J. Salido)
Contempla como el Cordero
celestial del Sacro
Nombre
al Calvario
lastimero
caminó con el madero
en el hombro y por
el hombre.
II-A
(Brochero)
……….
……….
……….
……….
en el hombro por el
hombre.
III
(Francisco J. Salido)
Con paciencia
esclarecida
sufría dolor constante
y en la tierra
endurecida
dio la primera caída
porque el hombre se
levante.
III-A
(Brochero)
……….
sufría el dolor
constante
……….
……….
para que al hombre levante.
IV
(Francisco J. Salido)
Contempla aquí con ternura
como su Madre y San Juan
en la Calle La Amargura
vieron su sacra figura
trasudada y con afán.
IV-A
(Brochero)
……….
……….
……….
vio su sagrada figura
……….
V
(Francisco J. Salido)
Viendo a Jesús fatigado
con la cruz el pueblo hebreo
a un Cirineo han obligado
a que le ayude al llagado
Cristo a llevar el madero.
V-A
(Brochero)
……….
con la cruz el pueblo fiero
……….
……….
……….
VI
(Francisco J. Salido)
Contempla como salió
una mujer lastimada
a Cristo el rostro
limpió
y en cuyo lienzo
quedó
en tres partes
estampada.
VI-A
(Brochero)
……….
……….
el rostro a Cristo limpió
y cuya toca quedó
……….
VII
(Francisco J. Salido)
Segunda vez con desvelo
dándole tormento y guerra
cayó el Señor en el suelo
y abriendo su boca el cielo
con ella besó la tierra.
VII-A
(Francisco J. Salido)
……….
……….
……….
y siendo su boca el cielo
……….
VII-B
(Brochero)
……….
dándole tormenta y guerra
……….
izando la boca al cielo
……….
VIII
(Francisco J. Salido)
Las matronas de Sión
viendo a Jesús entre abrojos
tanto sienten su pasión
que arrojan del corazón
las lágrimas por sus ojos.
VIII-A
(Brochero)
……….
……….
……….
……….
las lágrimas por los ojos.
IX
(Francisco J. Salido, Brochero)
Tercera vez el Sagrado
Isaac autor de la luz
cárdeno y desfigurado
cayó en tierra fatigado
con el peso de la cruz.
X
(Francisco J. Salido)
Tantos tormentos le dieron
a Cristo haciéndole agravios
y porque con sed le vieron
hiel y vinagre pusieron
en sus santísimos labios.
X-A
(Brochero)
……….
……….
que por que sed le vieron
hiel y vinagre le pusieron
……….
XI
(Francisco J. Salido)
Contempla como el Cordero
después ya de desnudado
le tendió un verdugo fiero
sobre el pesado madero
hasta llegar a enclavarlo.
XI-A
(Brochero)
……….
……….
lo tendió un verdugo fiero
en el pesado madero
para llegar a enclavarlo.
XII
(Francisco J. Salido)
Crucificado, alma mía,
y de tu amor hecho alarde
estuvo nuestra alegría
desde las doce del día
hasta las tres de la tarde.
XII-A
(Brochero)
……….
y de su amor hecho alarde
……….
……….
……….
XIII
(Francisco J. Salido)
Lleno de furia un soldado
al cadáver Santo avanza
y de furores armado
rompió su santo costado
con el golpe de una lanza.
XIII-A
(Brochero)
……….
……….
……….
rompió su sacro costado
……….
XIV
(Francisco J. Salido, Brochero)
Santos varones vinieron
dada las tres de la tarde
de la cruz lo descendieron
y en los brazos le pusieron
de su Santísima Madre.
